En el año 1995 con la firma del convenio de colaboración institucional entre el Obispado de Vic, el Ayuntamiento de Vic y la Generalitat de Cataluña, se decidió iniciar una nueva etapa para el Museo que ha llevado a la construcción de un nuevo edificio destinado exclusivamente a usos museísticos, ubicado al lado del gran campanario románico de la catedral, en el mismo lugar que ocupaba el antiguo colegio de Sant Josep.